Las deudas de Cuba con el Club de París de acreedores estatales han aumentado. Ahora son las segundas más elevadas de la región.
A finales de 2023, la deuda de Cuba con el Club de París de acreedores soberanos ascendía a 4.620 millones de dólares. Esto la convertía en la segunda deuda más alta de América Latina y el Caribe después de la de Venezuela. Así se desprende de un informe publicado por el Club de París.
En el informe (PDF), que contiene cifras de finales del año pasado, el Club de París señala que 259 millones de dólares de la deuda cubana son atribuibles a cantidades concedidas a La Habana por instituciones en concepto de ayuda oficial al desarrollo (incluidos créditos a la exportación o agencias de desarrollo). Los 4.360 millones de dólares restantes son ayuda no oficial al desarrollo.
El Club de París, fundado en la capital francesa en 1956, sirve de foro de discusión y negociación entre acreedores oficiales y países deudores. Las 22 naciones acreedoras más importantes de la economía mundial, a excepción de China, están representadas en el Club de París. El Grupo Cuba del Club de París está formado por 14 países: Australia, Austria, Bélgica, Canadá, Dinamarca, España, Finlandia, Francia, Gran Bretaña, Italia, Japón, Países Bajos, Suecia y Suiza.
El jefe del gobierno cubano, Manuel Marrero, sólo señaló ante la Asamblea Nacional cubana, a mediados de julio, que aunque la deuda externa vencida había disminuido con respecto al año anterior, seguía siendo muy elevada, en torno a los 303 millones de dólares. Marrero reiteró que Cuba cumpliría con sus obligaciones de pago, en función de las posibilidades del país.
Acuerdos de deuda en el pasado
Durante la visita anual de representantes del Club de París a La Habana en septiembre de 2023, William Roos, copresidente del Club de París, dijo que los países acreedores "están dispuestos a comprender las dificultades y hallar la manera para que Cuba pueda honrar sus compromisos". Según informes de prensa, Roos propuso fijar un nuevo calendario para saldar los pagos que no se han realizado desde 2020.
En 2015, la isla firmó un acuerdo histórico con el Club de París. El acuerdo de deuda con el Club de París canceló 8.500 millones de dólares de la deuda total de Cuba de 11.100 millones acumulada desde 1986. El reembolso de la deuda restante de 2.600 millones de dólares en plazos anuales se aplazó hasta 2023 y parte de este dinero se destinó a inversiones en Cuba. Sin embargo, debido a la crisis desencadenada por la pandemia del coronavirus y el endurecimiento del bloqueo estadounidense, Cuba ya no pudo hacer frente al servicio de su deuda. En el verano de 2021, el gobierno cubano llegó a un acuerdo con el Club de París de acreedores estatales para aplazar los pagos. Según las cifras publicadas ahora, la deuda de Cuba con el Club de París ha aumentado en dos mil millones de dólares estadounidenses desde 2015.
China y Rusia cancelan las deudas
Además, la deuda de Cuba ha sido cancelada por otros acreedores estatales. En 2011, China canceló 6.000 millones de dólares estadounidenses al gobierno cubano; en 2013, México canceló 487 millones de dólares estadounidenses, mientras que Rusia redujo la antigua deuda de Cuba de 35.000 millones de dólares estadounidenses en un 90% a 3.500 millones de dólares estadounidenses en 2014, que debían invertirse en proyectos de inversión conjuntos en la isla. No fue hasta marzo de este año cuando el presidente ruso, Vladimir Putin, autorizó la modificación de los acuerdos de préstamo con la isla. La Habana obtuvo así mejores condiciones para el reembolso y la reestructuración de su deuda. El decreto presidencial ruso se refiere a los acuerdos de préstamos estatales que fueron concedidos entre 2009 y 2019 para financiar el suministro de petróleo y derivados a Cuba, entre otras cosas, como escribió la agencia de noticias cubana Prensa Latina. Según el informe, la deuda de Cuba bajo estos acuerdos asciende a 277 millones de dólares estadounidenses. Por primera vez, se ha concedido a Cuba la opción de pagar estas deudas en rublos, lo que significa que ya no tiene que utilizar dólares estadounidenses o euros para hacerlo.
Sin embargo, Cuba aún no ha llegado a un acuerdo sobre el pago de la deuda con sus acreedores comerciales del llamado Club de Londres, por lo que sigue excluida de los mercados internacionales de capitales. El Gobierno de La Habana está emprendiendo acciones legales en los tribunales londinenses contra una reclamación del fondo de inversión CFR I de las Islas Caimán, considerado el mayor tenedor privado de deuda cubana y cuya legitimidad no reconoce La Habana. En 2020, Cuba declaró oficialmente por última vez una deuda externa de 19.700 millones de dólares.