El costo de la mayoría de los bienes y servicios aumenta en Cuba. La tasa de inflación ronda el 45%. Aunque se trata de una clara mejora con respecto a los dos años anteriores, sigue siendo demasiado alta para los bolsillos de la mayoría de los cubanos. Al mismo tiempo, el precio de las divisas no ha dejado de subir desde febrero de 2023.
Para explicar la subida de los precios de las divisas en Cuba, debemos observar la estructura actual del mercado de divisas. Por un lado, están los proveedores: los que envían remesas, el turismo y los que cuentan con las divisas para ofrecelas en el mercado informal. Por otro lado están los demandantes: las personas que compran en MLC (Moneda Libremente Convertible, moneda digital cubana que sustituye al abolido CUC), las personas que quieren salir del país o importarlo y necesitan divisas en efectivo. El precio sube pues existe más demanda que oferta.
La subida del tipo de cambio informal es un proceso macroeconómico. Se traduce en un aumento del precio en pesos cubanos (CUP). Todo lo que se importa a este tipo de cambio informal más alto se importa a un costo más elevado y, por lo tanto, tiene precios finales más altos. En consecuencia, se deteriora la calidad de vida de las personas que perciben ingresos en CUP, especialmente las que tienen ingresos fijos, como los pensionados o los trabajadores del sector público .
El impacto a nivel micro se observa en el funcionamiento de las empresas. Un tipo de cambio muy inestable obliga a las empresas a actualizar constantemente sus tipos de cambio, provocando esto complicaciones en la economía, además de inflación.
Cuando el tipo de cambio se vuelve muy inestable, se tiende a fijar los precios en moneda extranjera y a trabajar en moneda extranjera en vez de en CUP. Este fenómeno se denomina sustitución de divisas. No obstante, las cosas aún no han llegado a ese punto en Cuba, se sigue trabajando en la moneda local.
Para combatir la subida del tipo de cambio informal y sus consecuencias, hay que combatir las causas. Sería necesario aumentar la oferta de divisas en el mercado oficial de divisas. Esto puede hacerse gradualmente con más turismo y una paulatina recuperación de las remesas. Para un esfuerzo más rápido y eficaz y para mejorar la situación de vida de muchos cubanos, habría que eliminar el bloqueo económico y las sanciones impuestas por parte de EE UU., como retirar a Cuba de la lista de “Estados patrocinadores del terrorismo”, esto motivaría de nuevo a empresas de todo el mundo a suministrar a Cuba materias primas, reactivos, kits de diagnóstico, medicamentos, etc., sin tener que temer a las sanciones estadounidenses.
A nivel interno, los altos precios en CUP tendrían que reducirse para aliviar la gran demanda de divisas.